Humildad
Estamos en un mundo donde se busca más el recibir que el dar, el ser admirados que el admirar, el ser servidos que el servir, el ser escuchados que el escuchar, el bien propio más que el del prójimo, en sí estamos en un mundo que brilla de egocentrismo, materialismo y ansias de poder.\nRealmente casi todos los problemas, divisiones, heridas y rencores se le deben a esa detestable palabra llamada Orgullo, que tanto mal hace en las vidas, varias son las relaciones que se destruyen y dañan debido a esa actitud de orgullo.\n\nHoy más que nunca necesitamos reconocer lo que realmente somos, me llama la atención la etimología de la palabra humildad. La palabra “humildad” viene del latín humilitas y esta viene de humus que significa “tierra”. La palabra humildad esta relacionada con la aceptación de nuestras propias limitaciones, bajeza, sumisión y rendimiento. Cualidades muy humanas (de la tierra). Cuán necesario es que aceptemos lo que realmente somos, realmente no somos absolutamente nada, y si somos algo es gracias al amor y misericordia de Dios, pues si no fuera por El ni polvo fuésemos.\nLa verdadera humildad nos lleva a reconocer que no lo sabemos todo, que necesitamos de otros y lo más importante es pedir perdón y remediar los errores que cometemos.\n\nHace tiempo escuché un concepto sobre humildad que me llamó mucho la atención y me ha dejado una gran enseñanza, tal concepto dice así: “Humildad es reconocer lo que puedo hacer y lo que no puedo hacer” ¡Qué gran realidad!\nEs tremendo cómo el orgullo nos puede hacer pensar que podemos ser pulpos y hacerlo todo. Por ejemplo: Es como si alguien que nunca ha manejado una góndola, decidiera manejarla para demostrar su capacidad, o si alguien que es especialista en la contabilidad decidiera entrar a un quirófano y realizar un transplante de corazón a un paciente sólo para demostrar que sí lo puede hacer, o si yo decidiera pilotear un F16 sólo por no aceptar que no estoy preparado para hacerlo, existe una gran cantidad de ejemplos, y de hecho, muchos podrían tomarse de la realidad.\nActualmente existen personas en el lugar equivocado, haciendo lo que no deben hacer, actuando con apariencias y dañando a otros, simplemente por no tener la valentía de aceptar que no son llamados a determinada ocupación, por no reconocer lo que pueden hacer y lo que no pueden hacer, también por no prepararse y lo más importante, por no pasar tiempo a solas con Dios para asegurarse el porqué y para qué están en este planeta.\n\nEstoy convencido que una de las actitudes que más daño causa en hogares, empresas, iglesias, ministerios e instituciones, es esa tonta actitud de orgullo. Necesitamos desesperadamente ubicarnos en lo que Dios quiere hacer en nuestras vidas. Lamentablemente tendemos a buscar la admiración, crédito, halagos y exaltación por nuestra propia cuenta y parece que no entendemos que aunque lo que se busca no es del todo malo, no es ese el principio, pues Dios permite que tengamos halagos, créditos, admiración y demás. El detalle es que lo buscamos por nuestra propia cuenta y lo más tremendo aún, cuando tenemos esto se nos sube a la cabeza, nos inflamos de Ego y sólo hay espacio para el YO y nada más. ¡Dios! ¡Realmente qué terrible es el orgullo y cuán necesaria es la humildad!\n\nNecesitamos vivir como Dios quiere y esperar en El, recordemos esto: “Humillaos delante del Señor, y el os exaltará. Santiago 4:10. Con gran urgencia necesitamos humildad en todas las áreas. Una de las peticiones y oraciones que hay en nuestros labios diariamente es que haya paz y sanidad en nuestra nación y para esto necesitamos no sólo ser humildes, sino “Humillarnos”, o será que se nos olvido esto: “Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados y sanaré su tierra. 2 Crónicas 7:14 \n\nRealmente es mi oración que podamos entender lo importante que es la humildad en nuestras vidas. Te insto a que apartes un momento y a solas con Dios le pidas un corazón humilde. Quiero culminar con unas palabras de mi Maestro por excelencia. Mi Rey Jesús nos dice: “Aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas” Mateo 11:29\n\n\nTe deseo MegaBendiciones\nHenry Camacho\n0416-478.81.28\nseamosdiferentes@hotmail.com '