Ante una Encrucijada al Tomar una Decisión
Encienda la luz de las Escrituras\n\nCuando entramos a una habitación oscura para buscar algo, nuestra primera acción es encontrar el interruptor y encenderlo. La luz ilumina hasta la última esquina de la habitación, y podemos encontrar rápidamente lo que estamos buscando. ¡Es mejor que estar buscando a tientas en la oscuridad! \n\nCuando estamos buscando en la oscuridad acerca de una decisión, lo primero que debemos buscar es la Biblia, la luz de Dios para la vida.\n\nLa exposición de tus palabras imparte luz;\nDa entendimiento a los sencillos. (Salmo 119:130; vea también v. 105)\n\nPorque el mandamiento es lámpara, y la enseñanza luz,\nY camino de vida las reprensiones de la instrucción. (Proverbios 6:23)\n\nAparte algún tiempo durante el día para leer la Biblia y permita que ilumine su situación con la verdad de Dios. A medida que usted la estudie, busque preceptos (instrucciones específicas) y principios (instrucciones generales). Los preceptos son mandamientos muy precisos para no dar lugar a dudas acerca de lo que Dios quiere decir. Por ejemplo, \"No te asocies con el chismoso\" (Proverbios 20:19b); \"No mintáis los unos a los otros\" (Col. 3:9a); \"Porque esta es la voluntad de Dios… que os abstengáis de inmoralidad sexual\" (1 Tes. 4:3). Aplicando estos mandamientos directos, específicos a su situación puede guiarlo directamente a la mejor elección para usted. \n\nLos principios, por otra parte, son como focos, que cubren una variedad de circunstancias. Por ejemplo, Pablo dice,\n\nTodas las cosas me son lícitas, pero no todas son de provecho. Todas las cosas me son lícitas, pero yo no me dejaré dominar por ninguna. (1 Cor. 6:12)\n\nAquí tenemos un vistazo al proceso de tomar decisiones. A medida que Pablo considera una acción en particular, casi lo podemos escuchar hablando consigo mismo, \"Este camino pudiera no ser pecado, ¿pero es provechoso? Si es así, pudiera seguir adelante. Pero, ¿me llevará esta acción a un hábito que no pueda controlar? Si es así, entonces desistiré.\"\n\nA medida que lee las Escrituras, ¿puede usted descubrir los principios que guiarán su decisión? Para extraer principios de la Biblia, usted debe utilizar técnicas de interpretación sólidas y pensar con madurez. El proceso no puede ser apresurado. Ore acerca de lo que lee. Anote sus reflexiones. Invite al Espíritu Santo a que le ayude a comprender y a aplicar lo que usted está meditando. Después de un tiempo, usted pudiera unirse a David en su exaltación llena de alabanza al Señor:\n\nTú enciendes mi lámpara, oh Señor;\nMi Dios alumbra mis tinieblas. (Salmo 18:28)\n\nEsté atento a la instigación tranquila del Espíritu Santo\nEl mundo nos dirige a gritos diariamente. Los ídolos de los medios de comunicación proclaman sus valores pretenciosos. Las carteleras cubren el paisaje, atrayéndonos con sus tentaciones más atractivas. ¡La televisión, la radio, el cine, y aun nuestras computadoras ahora claman con una voz más y más alta para decirnos donde voltearnos, qué comprar, qué pensar!\n\nEl Señor, sin embargo, raramente grita sus instrucciones, cuando Él habla lo suficientemente claro, pero es necesario que estemos atentos a su voz. \n\nPero, ¿cómo podemos estar seguros que fue Su voz la que escuchamos? Siempre recuerde de verificar que su decisión está de acuerdo con los preceptos y principios de la Palabra de Dios, y es una buena idea preguntarle a un amigo sabio que analice también el deseo de su corazón.\n\nPruebe sus deseos a través d e Consejería sabia\n\nSin consulta, los planes se frustran,\nPero con muchos consejeros, triunfan. (Proverbios 15:22)\n\nLos consejeros sabios saben cómo hacer preguntas específicas que penetran hasta lo más profundo de nuestros motivos y disciernen nuestras verdaderas intenciones. Un verdadero amigo nos ayuda a ver la diferencia entre la ambición y la codicia, entre el entusiasmo y el egoísmo, entre la firmeza y promoverse a sí mismo. ¡Discernir nuestros propios motivos es como hacernos una cirugía del corazón nosotros mismos! Necesitamos un experto que sea objetivo y que tenga un ojo clínico y la disponibilidad de decir lo que necesitamos escuchar, aun cuando duela. El dolor del momento valdrá la pena si la consejería nos evita un desastre más tarde.\n\nSiga adelante en fe\n\n¿Ha encendido usted la luz de las Escrituras? ¿Ha estado atento a la instigación del Espíritu Santo? ¿Ha probado sus deseos a través de consejería sabia? Ahora tome la mejor decisión que pueda, y siga adelante en fe.\n\n\"¡Espere!\" pudiera usted objetar. \"Seguir adelante no es tan sencillo como parece. ¡Necesito más tiempo!\"\n\nAlgunas veces nos falta la confianza para tomar este paso importante, en particular cuando, habiendo hecho todo lo que podemos hacer para tomar una buena decisión, aún no estamos seguros en qué dirección debemos ir. Aún nos sentimos inmovilizados por el temor a cometer un error. ¿Qué podemos hacer con esas dudas persistentes que nos dejan en una confusión?\n\nLas dudas no significan necesariamente que usted está fuera de la voluntad de Dios. A pesar de sus dudas, usted aún puede seguir adelante porque su confianza no está basada en su decisión sino en el Señor, que puede utilizar aun su juicio equivocado para el bien de usted y para Su gloria. El concepto de la voluntad de Dios tiene su núcleo en la doctrina de la soberanía de Dios, la cual es una fuente de gran seguridad para los creyentes. Dios está en control de su vida y de las vidas de aquellos que usted ama, aun cuando usted no puede ver su mano o escuchar su voz tan claramente como desearía.\n\n¡Así que anímese! Cambie su encrucijada en un camino de fe, y permita que comience el peregrinaje.'