Consejos para la Dirección del Servicio Juvenil
Lectura Bíblica\n
- Debe leerse el texto bíblico únicamente. No se debe de leer los títulos o comentarios que se encuentran antes de un pasaje bíblico, o los apuntes de una Biblia de estudio, como si fuera texto bíblico. \n
- No se debe de leer solamente una porción o fragmento de un versículo. Es aceptable leer un versículo en su totalidad, o aún mejor leer varios versículos que vienen antes y después para dar un poco de contexto al versículo. \n
- Como regla general, se debe leer UN pasaje en su totalidad. No se debe de seleccionar versículos de textos muy separados y luego intentar leerlos en forma consecutiva. \n
- No se debe de leer en forma alternada un texto demasiado largo. Si se escoge un texto largo, la persona dirigiendo la lectura debe de leer la primera parte, y luego una sección más corta se puede leer en forma alternada. \n
- Hay que guiar a los jóvenes (y a las jóvenes) con la voz cuando se lee la Biblia al unísono. Si hay confusión en la lectura, o si no hay coordinación en la congregación, el dirigente debe parar la lectura y empezar de nuevo.
- El dirigente de la música debe decir claramente el número del canto o himno que quiere que los jóvenes canten, y en cuál himnario o librito de coros se encuentra. \n
- En momentos de más formalidad, se tiene que decir a los jóvenes cuando deben ponerse de pie y cuando pueden sentarse. Debe de existir cierta formalidad en la dirección. La gente está viendo al dirigente para recibir instrucciones de lo que sigue. \n
- La entrada debe de ser clara y con ánimo, y continuar así por lo largo del canto. Procura que la introducción de los cantos sea breve, y conforme a un espíritu de adoración. \n
- Hay que guiar a los jóvenes con la voz, cantando fuertemente. Si hay confusión en el ritmo, o si no hay coordinación en el grupo, el dirigente debe parar el canto y empezar de nuevo. \n
- Como principio general, si un canto se presta a las palmas, el dirigente debe decírselo a los jóvenes antes del inicio del canto.
- Sé feliz. ¡Sonríe! No es ilegal que el dirigente sea feliz. Su animo contagiará a los demás. \n
- Sé reverente. El hecho de ser animosos no quiere decir que no podemos ser reverentes y respetuosos en la reunión. Ayuda a los jóvenes a prepararse para tener un tiempo de alabanza, edificación y adoración para la gloria de Dios.