Dios Cumplió, Ahora me Toca a Mí
Hace unos días atrás, como de costumbre aborde un bus, rumbo a mi trabajo. Una mañana normal, un tanto nublada; todo era normal, hasta llegar a Concepción. En un paradero x, sube un pasajero, un joven de aproximadamente 25 años, al que muchas veces había visto por el centro de Concepción, en los video-juegos, llevando una vida de quinceañero, lo veía con amigos, todo normal. Así pasaron los años, nunca conversé con él, sólo lo veía, hasta ese momento, del episodio en el bus. Se sentó a mi lado, me miró y me dijo: (yo, estaba a la expectativa y con cierta desconfianza) “Usted, ¿cree en el Dios Todopoderoso?”; su hablar era un tanto extraño (fonéticamente), le respondí que, “sí, creo en Dios, que es poderoso”. Luego, sacó de su bolsillo dos fotocopias, una correspondía a una hoja de un diario local del 2003, y la otra, a un parte médico. Y, comenzó a contarme su historia. “En el año 2003, tuve un fuerte accidente automovilístico (una foto del auto chocado en la fotocopia del diario lo confirmaba y una foto de él en el mismo). “Viajaba junto a un amigo y chocamos, mi amigo murió; yo, quedé muy grave, con un fuerte golpe en mi cerebro, más fracturas en mi cuerpo, la lesión de mi cerebro era irreversible “(la copia del parte médico lo confirmaba). “Estuve muerto cuatro veces, y me resucitaron, en uno de esos estados de muerte, le dije a Dios: `Dios si haces que me recupere, si se me sacas de esto, yo le contaré a todos lo que hiciste por mí`”. Hasta este punto yo estaba asombrado por las pruebas y lo que veía en él, estaba prácticamente normal; pero lo que llamó más mi atención y me hizo recapacitar fue la siguiente declaración. “Dios cumplió con su parte (lo sanó de un daño irreversible en su cerebro), ahora yo estoy cumpliendo la mía (hablar a todos de su sanidad). Su nombre es Iván Polanco.\n\n¿Que hizo Dios por ti?, ¿Qué ha hecho Dios en nuestras vidas? Dios Padre, “nos amó de tal manera que dio a su único Hijo, para que al creer en Él no nos perdamos, sino que tengamos vida eterna”, (Juan 2:16-18) y algunos de nosotros hemos tomado esta bendición y promesa. Jesús cumplió su parte al morir en la cruz por nuestros pecados, darnos su perdón y restaurar nuestra comunión con el Padre. Él cumplió su parte… ¿estás cumpliendo la tuya? ¿Estás sirviendo en su obra, adorando a Dios con tus palabras y acciones, proclamando el mensaje de salvación a través de Jesucristo, y sirviendo a las necesidades de este mundo?\n\nCumplamos nuestra parte… es lo justo.'