El Afan y la Ansiedad al Servir al Señor
En una congregación X, se configura una X directiva, integrada por X personas. Este grupo humano comienza entonces a planificar actividades para los jóvenes, pues son la directiva de jóvenes. Comienzan a articular un plan de trabajo, buscan al Señor, piden consejo de personas, de ex-directivos, de pastores, de gente con experiencia para poder formar un buen grupo de trabajo. La directiva comenzó a regir en marzo de X año. Comenzaron muy bien, la comunión que los jóvenes tenían con Dios era muy rica, muy plena, daba gusto estar ahí por que la presencia de Dios se dejaba sentir de una manera muy dulce y poderosa.\n\nPero, pasados unos meses, algunos jóvenes fueron decayendo, algunos cayeron en pecado, muchos dejaron embarazadas a chicas, muchos se empezaron paulatinamente a alejar, y la directiva no sabe que pasa. Se juntan, buscan al Señor, se preguntan qué pasa, porqué los chicos siempre llegan tarde a la reunión, y porque se van antes de que termine, no saben que fue lo que paso. Comienzan a visitar, comienzan a hablar con cada uno de ellos, pero aún no saben que pasa. Entran en un estado de ansiedad y afán de poder sacar de esa situación al Ministerio de Jóvenes.\n\n¿Te ha pasado eso?\n¿Has estado frente a una situación así, sin saber qué hacer?\n\nLa directiva X, entonces decide hacer algo. Uno de ellos dice: \"Hagamos una reunión donde se toque Hip-hop, Ska, Funk, para que se motiven y comiencen nuevamente a asistir a las reuniones. Lo hacen, llegan varios jóvenes, pero a la próxima reunión, ninguno de los que fue vuelve. ¿Que pasa? Nuevamente la ansiedad los vuelve a consumir. ¿Que hacemos?, ¿se te ocurre algo? se preguntaban entre ellos, no tenían idea de lo que pasaba, buscaban respuestas en Dios, y organizaban cosas para intentar revertir la situación. En su afán de poder hacer algo, hacían lo primero que se les ocurría, pero no hacían lo que estaba en el corazón de Dios, porque no había tiempo, había que sacar del hoyo al ministerio juvenil.\n\n¿Te has encontrado en esa situación?\n¿Trabajando tanto y sin resultados?\n\nNo porque organices distintas actividades en la Iglesia estas en la voluntad de Dios. No porque quieras que los jóvenes se levanten estas trabajando en la voluntad de Dios. La voluntad de Dios en estos casos, es que te saques ese peso de encima de cambiar a los jóvenes, porque eso no te corresponde a ti, es tarea del Espíritu Santo, lo que tienes que hacer es despojarte de esa ansiedad perfectamente entendible, y volverte al Señor, y preguntarle que quiere Él para los jóvenes. Vuélvete a Él, y escúchale. Date el tiempo de saber para donde Dios te dirige. Muchas veces nosotros caminamos en una dirección, y en un punto Dios quiere que doblemos, y en cambio seguimos derechos, es importante estar sintonizados con el corazón del Señor. Si las cosas no funcionan, si estás trabajando arduamente, y las cosas no dan resultados, haz 2 cosas:\nSigue adelante\nBusca al Señor de corazón, y averigua que Él esta haciendo en la vida de los chicos.\n\nServir al Señor no es que las cosas salgan bien todo el tiempo. A veces las cosas costarán mucho, costarán lágrimas, costarán tiempo.\nPaciencia, despójate de ese afán de cambiar a los jóvenes, busca la perfecta voluntad de Dios, sigue trabajando y ora por los muchachos. Nadie dijo que esto de servir a Dios era solo alegría. Mira el ejemplo de Jeremías. Nadie le creía lo que profetizaba, solo profetizaba mal, lo odiaban. A Pablo pocos le creían por su pasado, y luego lo querían matar y muchos cristianos además lo criticaban.\n\nAfírmate en el Señor, despójate de la ansiedad.\n\nDios te Bendiga'