¡Es tiempo de pelear!

‘El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.’ Juan 10.10\n\n¿Qué pasaría si entraran a robar a tu casa, y vos estuvieras ahí, viendo todo? Estás ahí parado, y ves cómo destrozan tu hogar, lo desordenan, rompen tus cosas, y la peor parte, comienzan a golpear a tu familia, los humillan, los lastiman, los destrozan. ¿Cómo te sentirías?\n\nDejame decirte que eso es lo que está pasando. Satanás está entrando en nuestra casa, nos está saqueando. Está golpeando nuestra familia, está destrozando nuestros hogares, los está dividiendo, los está desarmando, y después los ensambla como quiere. Este es un tiempo de guerra, ya no estamos para perder tiempo. Porque mientras nosotros estamos tan tranquilos, Satanás ya está con su ejército en batalla. Es tiempo de ponerse al frente de la batalla, es tiempo de pelear contra principados, contra potestades que están queriendo destrozarnos y desarmar nuestros hogares; y por fin reclamar y recuperar lo que es nuestro. Es tiempo de avanzar, no de retroceder. Es tiempo de conquistar, no de escapar. Es tiempo de coraje, no de cobardía. Es tiempo de vencer, no de ser vencidos. Es tiempo de actuar, no de jugar.\n\nAunque el ladrón haya llegado para hurtar, matar y destruir, nuestro Señor vino para darnos vida en abundancia. Es necesario que nos pongamos en la brecha, y tomemos partido en esta situación. Es necesario que como Iglesia, como familia, como cuerpo, nos levantemos con autoridad frente a toda hueste de maldad y defendamos lo nuestro. Es tiempo de recuperar lo que el saltón y la oruga se llevaron, es tiempo de restaurar nuestros matrimonios, de rescatar a las familias destrozadas, de recuperar a nuestros hijos perdidos, y defender el diseño original que Dios estableció para nuestras familias.\n\nOración: Señor, hoy pongo en tus manos mi familia, mis hijos, mis futuras generaciones. Hoy clamo por aquellos familiares que aún no te conocen, intercedo por aquellos matrimonios separados, y ruego para que en nuestro país sea establecido tu diseño original de la familia.\n'