Querido amigo escucha lo que hoy te digo:\nTenía yo odio en mi corazón\nY seguir viviendo pensaba no tenía razón\nMis padres de mí se descuidaron \nAndaba sola sin tenerlos a mi lado\nEl diablo me hacia lo que él quería\nPor el pecado me arrastraba y más mala me ponía\nEstaba haciendo los placeres del mundo \nMe caía y me iba a lo más profundo\nPero allí en la oscuridad no encontraba la felicidad\nEn vez de ir mejorando fui empeorando\nY entre más seguía en el pecado mi corazón seguía llorando\nLlegué a sentirme tan triste que vivir ya no quise\nTrataba de quitarme la vida porque ya no la quería\n\nNunca me imagine que Dios todavía me amaba \nA pesar de las tantas veces que yo lo había dejado\nÉl llegó a mi vida y en mi cara puso una sonrisa\nY alegró mucho los días de mi vida\nPara los problemas que tenía me enseñó una nueva salida\nY me llamó “querida” aunque sabía que no lo merecía\nMe dijo: “Hija mía, tú para mí todavía vales mucho. Tus oraciones y gemires yo los escucho y por tu vida lucho. Nunca te olvides que contigo yo estaré.”\nSus palabras tocaron mi corazón y se encendió en mí una nueva canción\n¡Ahora feliz yo me siento porque al Dios Eterno tengo!'