Historia Cotidiana De Un Buen Boxeo
Ya para el segundo asalto todos creían que seria derrotado,\n\nque la sangre que se me salía de los golpes marcados sería el trofeo de mi enemigo, \n\nTenia miedo, mi cuerpo era un costal de huesos rotos y en el mejor de los casos un costal de huesos maltratados... \n\n\"el Señor es mi escudo, mi fuerza, el que sustenta mi cabeza, el Señor es mi Pastor, mi Alfa y Omega...\" \n\nlevantaba oraciones y fragmentos de salmos que aprendí en las reuniones dominicales casi todas incompletas,\n\nsonó la campana y sin darme cuanta ya el tercer round esperaba... \n\nHe aquí al campeón a punto de ser derrotado, \nhe aquí al de los puños mas violentos con la cara destrozada, \n\npensé en las viudas, en los desvalidos \ny en los hermanos en las cárceles... \n\nMe di cuenta que la batalla mas importante la había perdido hacía ya mucho tiempo, \n\nclamé a Dios con tanto amor que salí a recibir mas golpes pero ahora con la consigna de amar a mi enemigo, \nponer no sólo la otra mejilla sino también la otra costilla...\n\n\nMientras mas golpes recibía mas seguro estaba de que hacer al terminar el ultimo asalto... \n\nPara todos fui un perdedor, un sucio peleador con sangre y sin dinero... \n\nTomé la Biblia que dejé guardada cuando comencé a dar golpes sobre un cuadrilátero...\n\nNo podía ni sostenerla, \nsalí a la calle a buscar a mis amigos y no los encontré, \nbusque a mis enemigos y ellos no me recibieron, busqué y busqué \nhasta escuchar la dulce voz del Padre... \n\"Ama a los niños, vela por la viuda, alimenta al huérfano...\"\n\n\nPara muchos he perdido la pelea de campeonato... \nPara mí, \nHe ganado la batalla más importante contra el egoísmo... \n\nAhora soy un anónimo que golpea fuerte, \nque ama mucho, \nque necesita poco.'