Transitar Por La Vida

Transitar por la vida es similar a como lo haces en un auto por las calles de tu ciudad; Así como se formaría fácilmente un caos al cortarse la luz y de esta forma, imposibilitar a los semáforos su funcionamiento, el hombre encuentra fácilmente dificultades al no tener algo o alguien que lo guíe; En el caso de los semáforos inhabilitados, el continuar, avanzar, detenerse o cambiar de rumbo queda al total criterio de cada conductor; ¿te suena familiar?\n\nTransitar por la vida es similar a como lo haces en un auto por las calles de tu ciudad; Así como se formaría fácilmente un caos al cortarse la luz y de esta forma, imposibilitar a los semáforos su funcionamiento, El hombre encuentra fácilmente dificultades al no tener algo o alguien que lo guíe; En el caso de los semáforos inhabilitados, el continuar, avanzar, detenerse o cambiar de rumbo queda al total criterio de cada conductor; ¿te suena familiar? El hombre ha querido por años recorrer su rumbo ignorando semáforos, señales, advertencias y todo cuanto pretenda limitar o guiar su rumbo. Esto lo declara magistralmente el profeta Oseas al ver cómo el pueblo de Israel pretende guiarse en su caminar dejando de lado al Dios que por años fue el apoyo, sustento y guía de sus padres y abuelos.\n\nMuchas personas han salvado su vida milagrosamente de accidentes automovilísticos, otros no han corrido muy buena suerte. Muchos salieron contentos desde su hogar sin pensar que no alcanzarían a llegar a su destino final. ¿Es Dios un obstinado ser que pretende trazar nuestros rumbos? ¿Son las leyes del tránsito una serie de mandatos sin fin alguno?\nCualquier persona respondería con un NO rotundo a la segunda pregunta, ya que saben y comprenden que la ley del tránsito posee una intención mucho más grande que evitar congestiones vehiculares, o asegurar un tránsito expedito, esas personas saben que esta ley tiene como fin evitar la muerte que proviene de choques automovilísticos, irresponsabilidades de peatones y conductores, etc. Pero mucho más difícil es responder y comprender que hay un fin mucho más sublime en que Dios sea partícipe en nuestra vida guiándola; Este es el AMOR y esto se traduce en que Dios no quiere que un camino equivocado en nuestra vida nos cause la MUERTE. Proverbios 14:21 dice: “hay caminos que al hombre le parecen rectos, pero su fin es camino de muerte”. Es curioso que las personas estén dispuestas a seguir y respetar leyes que los llevan de su trabajo a su casa, pero que no estén dispuestos a seguir las leyes que les permitirían vivir con sabiduría y cumplir los propósitos eternos de Dios. Es curioso que las personas sin titubear hagan caso de una advertencia de peligro en la carretera pero que no sean capaces de escuchar la voz de Dios al momento de tomar decisiones importantes.\n\nTe animo dejarte guiar por Dios; es tan solo su AMOR el que lo lleva a guiarte y dirigir tus pasos; el fin es guiarte a la vida y no a la muerte. ¿Recuerdas lo que dijo Jesucristo de sí mismo?; Yo soy el “camino”, y la verdad y la vida… ¿Darías vueltas y vueltas para llegar a cierto lugar, sabiendo que existe una calle por la cual puedes con certeza hallar tu destino? Si por diversas razones te encuentras transitando por la vida sin rumbo, a tu propio criterio, expuesto a riesgos y dolores; Si estos años han sido sobrellevados dando vueltas, expuesto a dolores, angustias, frustración y pesar, recuerda que Dios guía tu vida por amor, que cada seña o advertencia que nos marca en Su Palabra es por protegerte de todo riesgo y peligro, y que nunca es tarde para virar en U a tus proyecciones, sueños o ambiciones y volver a transitar por la senda de justicia, la que trae vida. Dios cumple sus promesas. El salmo 23 es una de ellas; en tu caminar tan solo Dios puede guiarte, darte reposo, sustento, con amor hacerte transitar en esta vida.'
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