¿Para Qué Existo?

No todas las cosas creadas tienen metas. Mas todas las cosas creadas tienen una razón de ser. Los objetos creados por los hombres tienen una utilidad según la capacidad de la mente creadora. Al contemplar al ser humano podemos comprender que tiene un propósito supremo porque fue creado por un Dios Omnipotente. \n Cada ser humano tiene un propósito por el cual fue creado por Dios. Frecuentemente el propósito divino se confunde con metas y sueños. \n\nY es por eso que varias veces que luego de alcanzar nuestros sueños o metas no nos sentimos totalmente satisfecho y percibimos que nos falta algo. Aunque nunca se lo comentemos a alguien, en nuestro interior existen preguntas: ¿Y ahora que? ¿Que mas hago? ¿Que pasa conmigo?\n La realidad es que si hemos aceptado a Cristo como nuestro Salvador, somos seres espirituales que habitamos en cuerpos humanos. Es decir que los sueños y metas solo satisfacen la parte humana, mas el caminar hacia el propósito por cual Dios nos ha creado nos lleva a vivir a plenitud. \nEs de suma importancia que nos propongamos alcanzar metas, mas debemos asegurarnos que estas metas no nos desvíen del propósito que Dios tiene para nuestras vidas. \n\n¿Cómo saber la diferencia entre metas y del propósito de Dios para nuestras vidas? Las metas nos ayudan a lograr y a superarnos como seres humanos, y de estas metas puede beneficiarse uno mismo y en muchos casos hasta toda una comunidad. \nMientras que el propósito divino nos devuelve nuestra identidad como hijos de Dios, y nos permite colaborar para el Reino de nuestro Padre Celestial al ganar vidas para Cristo. \nEs decir que el propósito nos permite ayudar a otros a encontrar a Cristo y nos enseña agradar al Dios todopoderoso. \n\nEs necesario notar que sólo un inventor tiene el derecho legitimo a ponerle nombre y a decir cual es el uso del objeto que ha inventado. Es por eso que Dios es el único que tiene derecho a decir quiénes somos y para qué existimos.\n \nUsualmente tendemos a leer las instrucciones que vienen con algo que hemos comprado para saber cómo usarlo. Entonces podemos decir que la Biblia es ese manual de instrucciones que el creador incluyó para que podamos vivir a lo máximo. Es en la Biblia y por medio del Espíritu Santo que podemos saber quiénes somos para entonces comprender para qué existimos. Como dijo alguien cuando estés en duda lee las instrucciones. Leyendo la Biblia comprenderemos cuál es nuestra verdadera identidad, a la vez que el Espíritu Santo nos muestra la razón de nuestro existir. '